Jovenes Oblatos

Que decir de esto, no? fue y es algo que no podré olvidar jamás, no se dan una idea lo que espero el Congreso del año que viene.
La calidad de persona que había, como nos encontramos en el mismo camino, una cosa que es muy difícil de olvidar. Es algo que te llama a más, que te busca, toma y no te suelta.
Es esa buena onda de cada uno de los chicos y chicas que conocés en este ámbito, te cambia la forma de disfrutar la vida.
Algo que te llama a seguir, a fortalecer lo que creo, porque ves a otro que se esfuerza para demostrar lo que es, tal como es, sin caretas ni mentiras. Cosa difícil, que fuera de este espacio tan particular y especial, no lo podes ver o vivir tan dentro de uno.
Sinceramente nunca pensé que uno avanza tanto en la vida solo con salir de donde está sentado y contar algo que te hace ser lo que sos y lo que vas a ser.
Creo que fui el primero que paso a hablar, ustedes se pueden imaginar la vergüenza o el temor que se tiene, no?. Eso fue el primer día, ya después de pasar 2 o 3 veces más ese temor o vergüenza se fue, solo era pasar y hablar sin que nadie se ría, que les interese tanto lo que decía. Es algo que quizás nunca lo hubiera hecho en otro lugar. Saber que las personas que están aunque te equivoques no lo van a tomar para la joda, me inspiro mucho saber el apoyo que tenía de ellos.
Gracias a Dios y a todos los Chicos de este Congreso hoy puedo pasar al frente de cualquier persona y decirle, sin vergüenza, lo que quiero comunicar, sean 1 o 100. No importa la cantidad, importa la calidad de las personas.
Un gran abrazo a todos, que Dios los bendiga...