Jovenes Oblatos

Hola a todos mis hermanos y hermanas soy Emanuel tengo 20 años provengo de Antofagasta, Chile. Pertenezco a una (Capilla Santísimo Sacramento) de las 4 comunidades oblatas de la Parroquia San Pablo al norte de mi ciudad de origen. Y bueno me pidieron contar mi experiencia en esta nueva misión 2012 realizada en Vallenar, Chile en la Parroquia Santa Cruz del 20 al 30 de Enero.

Antes de misión los miedos se me hacen sentir ya que el año pasado en los pueblos donde misioné no nos había ido muy bien, estos pueblos son Camarones, Verbena y Santa Juana son una comunidad donde las diferencias parecen irreconciliables pero siempre hay solución cuando Cristo se hace vida entre los adultos, los jóvenes y los niños.

Llegamos al pueblo con propósitos claros, esparcir la palabra y la palabra se esparció de tal manera que niños, jóvenes y adultos respondieron al encuentro con el señor.

A pesar de las diferencias entre las personas, los lazos creados con las personas de los pueblos son fieles testigos de la misión y la voluntad de Dios. Personas humanas con historias que te hacen soltar más de una lágrima, personas enérgicas que solo quieren esparcir la buena nueva y recuperar la comunidad que se ha deteriorado, jóvenes que buscan futuro y niños que se alegran tanto y lo único que quieren es llegar a ser más grandes para salir de casa a anunciar al Señor.

Cristo me conquisto a través de los pequeños detalles una vez más, porque su amor es grandioso, lo único que quiero es seguir viviendo estos lindos encuentros con Cristo, esto es un recargar el alma, recargar el espíritu para seguir caminando. El año pasado despedimos la misión con 2 personas y los 6 misioneros; y este año despedimos la misión con 30 personas adultas, 5 niños y 2 jóvenes, esto sucede cuando el Amor de Dios a través del compartir y el testimonio hace eco en nuestras vidas, y como diría nuestro amigo San Eugenio, “me han enviado a evangelizar”, pero al final de esos hermosos días quien sale misionado es uno mismo, porque el amor de Dios es tan grande que se hizo y se sintió durante la semana que estuvimos en el pueblo, y con la Fe, con el Amor, y con la Esperanza del reencuentro con esa hermosa gente, porque en el abrazo de un adulto, la sonrisa de un pequeño y la risa de un joven, es cuando nosotros podemos decir Misión Cumplida!!!

“Construyamos la historia de esta Tierra con el alma dispuesta a escuchar y servir entregando por Cristo las manos y la voz se abrirán los caminos para Dios, nos envía el Espíritu porque es su voluntad nuestra misión”

Saludos a: Carolina, Nene, Ignacio, Vanesa y Gabriel, recuerden, “otros pudieron haber sido, pero nadie lo hubiese hecho como ustedes” un abrazo!